
La final del WBC Boxing Grand Prix no solo marcará el cierre de un torneo histórico dentro del boxeo profesional, sino que también estará acompañada por un detalle simbólico que refuerza la identidad de cada protagonista. Para este combate decisivo, el WBC presentó uniformes completamente nuevos y personalizados para cada uno de los peleadores finalistas.
Cada uniforme fue diseñado de manera individual, incorporando el nombre del boxeador y los colores representativos de su país. Este concepto busca resaltar el origen, la historia y el orgullo nacional de cada participante, subrayando el carácter internacional del WBC Boxing Grand Prix y la diversidad de talentos que confluyen en el torneo.
Más allá del aspecto estético, los uniformes representan un reconocimiento al recorrido de cada peleador hasta la final, así como al esfuerzo y la disciplina que los llevaron a este momento. Vestir un uniforme pensado exclusivamente para esta instancia convierte la final en una experiencia única, distinta a cualquier otro combate en su carrera.
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