La cima del éxitó llego a Sebastián Fundora al ganar los campeonatos de peso súperwelter del Consejo Mundial de Boxeo y la OMB y ahora está de visita en México, recibiendo su Cinturón Verde y Oro, prometiendo regresar al ring en noviembre.
Una pelea titánica y sangrienta que puso a prueba la fuerza de voluntad, para derrotar a Tim Tszyu, quien sangró profusamente por un corte en la frente, mientras que la esquina de Sebastian tuvo que lidiar con el flujo que se filtraba por una nariz rota, que ahora se ha curado por completo. Sebastián recuerda con un toque de ironía: “Sí, eso es el boxeo. En el boxeo te golpean. Sin embargo… he estado sangrando por la nariz toda mi vida. Eso no es diferente. El referi venía a nuestra esquina al final de “Cada round nos preguntaba si estábamos bien. Pero estábamos listos para esta pelea e incluso para una pelea de quince rounds, si fuera necesario”.
Sebastián subrayó y explicó que persiguió y siguió la estrategia de utilizar su altura de seis pies y cinco pulgadas y media y su alcance de ochenta pulgadas, diciendo: “Tuvimos un año completo para trabajar desde esa última pelea y en las últimas dos peleas. Además de esto, estaba mostrando un golpe sólido. Teníamos un plan estratégico y lo cumplí. Queríamos mostrar un estilo diferente a los fanáticos”.
“Estamos totalmente centrados en los títulos y estoy feliz de ser campeón del mundo”.
Qué es lo siguiente. Sebastian vuelve a sonreír: “Quiero a quien esté dispuesto a pelear. Tuvimos algunos nombres importantes que nos llamaron la atención. Terence Crawford, Errol Spence. Una revancha con Tim Tszyu también suena genial, así que estas son grandes peleas. Soy la persona a vencer en el súper- peso welter, así que ¡HAGAMOSLO!”
Sebastian está convencido de que los campos de entrenamiento son campos de aprendizaje más que peleas: “Con este campamento, tuvimos un año para trabajar en las últimas cosas. Con las peleas estamos mostrando a todos lo que podemos hacer. Me alegro de que los fanáticos hayan disfrutado de mi boxeo. Habilidades. Quiero mostrarles que puedo hacer cosas diferentes y lo apreciaron.
“Ahora, como campeón mundial, será más fácil pelear. ¡Si ser campeón mundial es lo que se necesita para obtener esos nombres, que así sea! Tener un Cinturón Absoluto Verde y Oro significa que estoy haciendo bien mi trabajo. arriba, en la cima a ciento cincuenta y cuatro.”
La posibilidad de ascender en una división de peso aún no es un problema. Sebastián dice que está bien en 154 y no se esfuerza: “Hago un campamento duro que implica mucho trabajo para llegar a donde estamos. A partir de ahora… me siento cómodo. Mi hermana Gabriela y yo ahora somos ambos mundiales. campeonas y ella ganó. Hemos hecho historia”.
Gabriela, campeona de peso mosca, estuvo presente en la Fight Night de Sebastian, con el rostro marcado por la tensión y concentrada. Ella dijo: “Fue emocionante. Sé que trabajó muy duro, ya que estuve en el campo de entrenamiento con él. Poder mostrar su boxeo esa noche fue realmente muy bueno. Lo que Sebastian trabajó en el campo de entrenamiento, luego lo puso en el ring y eso hizo que los no creyentes… creyeran.
“Ser campeones es emocionante y es historia. Ser los primeros hermanos campeones mundiales simultaneamente está en los libros de récords del boxeo. Entrenamos juntos, estamos aquí en México juntos. Cada uno de nosotros tiene alguien en quien apoyarse”.
Sebastian está de acuerdo: “Es una motivación porque nos ayudamos mutuamente a alcanzar metas más altas. También es competitivo. Ella me ganó en el camino al campeonato, pero soy el primero en unificar. Así que a partir de ahora… estoy a la cabeza. Así que Voy a aferrarme a esto todo el tiempo que pueda. Ella me admira y yo la admiro a ella y también tenemos a nuestro padre Freddy como nuestro entrenador, así que es un asunto de familia”.
y ¿cómo se hizo Sebastián tan alto, aunque es modesto y no altivo? Piensa: “Probablemente podamos culpar a la leche y al brócoli. Como mucho, pero por alguna razón mi metabolismo rápido lo convierte en altura. Crecí centímetros hacia arriba… no hacia los lados. ¿Quién sabe si todavía estoy creciendo? ¿Parezco más alto?
“Hemos trabajado muy duro. Es un sueño hecho realidad para nuestra familia y para todos los que nos vieron llegar a este nivel. Estoy extremadamente agradecido de estar aquí y ser reconocido por todos en el mundo del boxeo”.
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