Por Mauricio Sulaimán – Presidente del WBC- Hijo de José Sulaimán
La labor que los medios de comunicación tienen en la vida es difícil de dimensionar.
Sin cobertura mediática cualquier actividad es minimizada, y los resultados de dicha actividad, se ven reflejados de manera proporcional. Por ejemplo, un producto sin publicitarse, difícilmente llegará a ser de éxito masivo, aún y cuando quizá, sea el mejor del mercado.
De la misma forma, un evento sin la cobertura mediática no tendrá el impacto ni la trascendencia que pudiera merecer.
El boxeo es un deporte que desde siempre ha sido altamente cubierto por los medios de comunicación. Primero fue el periódico; las reseñas de los combates cubrían varias páginas en los diarios, y todos los días había noticias de la vida personal de los peleadores, información internacional y todo tipo de publicación en la que este deporte abarcaba gran parte del diario, día tras día. Esto sucedió durante décadas en México y en muchos otros países del mundo.
Después llegó la radio como un gran complemento a los medios escritos. Semana tras semana se podía escuchar y seguir los combates de todas partes del orbe.
La invención de la televisión fue un gran cambio en todos los sentidos y en muchas áreas de la vida, pero en especial, en los deportes. El boxeo fue uno de los grandes elementos que la televisión utilizó para lograr sintonía en sus canales.
Fue así que el pugilismo y la lucha libre tomaron espacios en la programación semanal, y de la misma forma, fueron la plataforma para lograr que algunas marcas comerciales llegaran a crecer de manera impresionante.
La tradicional función sabatina de boxeo fue una fórmula que funcionó durante 47 años ininterrumpidamente. Televisa, con el patrocinio de Corona, llevó este deporte a todos los hogares de nuestro país, desde la Arena Coliseo, la Arena México y otras distintas plazas del mundo, creando así una gran afición a nuestro deporte. La televisión llevó miles de aficionados de las arenas a millones en casa.
Luego llegó el Pago Por Evento, y mató a la televisión gratuita, pues se limitó a muy pocos los que podían costear por los eventos, quitándole al pueblo la posibilidad de ver las peleas. En 2006, TV Azteca incursionó en el boxeo, y al día de hoy sigue con una gran programación, semana a semana, ganándose así el reconocimiento como La Casa del Boxeo. Actualmente, hay muchísimas plataformas que están transmitiendo boxeo todas las semanas.
Vivimos en un mundo diferente. La tecnología ha llegado, y eso ya no tiene vuelta atrás. Así como tiene grandes ventajas, también trae amenazas y problemas. En cuanto al periodismo, se han presentado cambios muy grandes, específicamente hablaré de la multiplicidad de personas que se autonombran periodista, e inclusive, medio de comunicación.
Individuos que con tan sólo abrir una cuenta de Facebook, Twitter, Instagram, o cualquier red social y tener un teléfono celular, se autodenomina periodista sin tener, en muchas ocasiones, la más mínima preparación en el ámbito. Sin estudios ni certificación salen al mundo a posicionarse como reporteros y el de su medio. Así como todo en la vida, hay buenos y hay malos, y en el boxeo se ha multiplicado este fenómeno de manera importante.
El WBC y yo tenemos máximo respeto a los medios de comunicación y a los periodistas. Nunca he negado una entrevista y jamás he evadido una pregunta, todo se responde. Para mí es muy importante la crítica constructiva, es la manera de recibir una guía, cuando uno se equivoca y se puede mejorar en todos los sentidos. El problema es cuando la crítica es irrespetuosa, es sistemática y sin fundamento; es más una campaña en temas de interés con beneficios personales.
La semana pasada tuve una de esas entrevistas. Un tipo, sin la menor ética profesional, se dedicó a atacar y tratar de acorralarme, sin la menor ética profesional. Tras media hora del Zoom, y tener el testimonio del boxeador en el que basó su ataque y ser ridiculizado, pues el boxeador confirmó que el WBC está procediendo de manera correcta, y que él está muy agradecido por las grandes oportunidades. El pseudo periodista inclinó la cabeza en señal de derrota y procedió a dar por terminada la entrevista. Es más, los invito a verla en el siguiente link https://twitter.com/i/broadcasts/1BRJjZZWloQJw
¿Sabías que…?
Don José Sulaimán fue un ser humano único y un gran visionario. Dedicó sus últimos años a desarrollar una plataforma digital, que ahora se llama streaming; quería tener el canal WBC Boxing para que los promotores, que no tenían contratos con televisoras, pudieran transmitir sus funciones.
Lamentablemente, la tecnología no estaba lista y no le tocó vivir lo que hoy en día es una realidad.
Anécdota de hoy
Mi papá creció en Ciudad Valles, una muy pequeña ciudad en San Luis Potosí. Cuando hablaba de sus inicios en el boxeo, su relato nos cautivaba: “Mis amigos eran boxeadores, y por ahí, me entró la pasión, pero recuerdo como su abuelito Elías me contaba con gran emoción, cuando escuchaba por radio las peleas de Joe Louis; él era el hombre más conocido del mundo, y gracias a la radio, un hombre árabe, viviendo en México, seguía sus proezas; eso es la magia de los medios de comunicación”.
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