
El 5 de diciembre se cumplirán cincuenta años desde que José Sulaimán fue elegido Presidente del Consejo Mundial de Boxeo, y su hijo menor, Mauricio, quien ahora lidera el WBC, acaba de concluir la Convención anual, este año en Bangkok, Tailandia.
Fueron días de trabajo intenso con resoluciones que condujeron a la formación de un Plan de Acción integral para el Próximo Año. Al concluir la Agenda de la Convención, Mauricio dijo: “Han habido muchas, muchísimas cosas. Ha sido increíble ver a tanta gente de todo el mundo reunirse y ser tan activa.
“Nadie está aquí de vacaciones. Hemos estado realizando una increíble cantidad de trabajo y elaborando un plan para el próximo año.”
Y sobre la singularidad, Mauricio enfatizó: “El WBC y el Muay Thai juntos en una Convención que siempre será recordada como una de las más grandiosas de todas.”
En cuanto al ambicioso Plan de Acción, Mauricio explicó: “Tenemos manejo de peso, antidopaje, educación sobre inversión y ahorro de dinero, muchos asuntos para los oficiales de ring, sparring y la obligatoriedad de que un knockout en el gimnasio debe ser reportado a la comisión de boxeo. Se presentaron muchas tecnologías: Fight Book, Ready to Fight, el juego Undisputed. Así que es un plan a largo plazo muy complejo para el próximo año.
“Las regulaciones antidopaje tienen que ser más estrictas. Vamos a implementar protocolos mucho más rigurosos y seguiremos avanzando.”
Conmemorando el quincuagésimo aniversario de Don José, mirando hacia atrás a cuando se convirtió en el catalizador y el soplo de aire fresco que sacudió las telarañas de la vieja era del boxeo, anunciando un nuevo amanecer.
Atesorando el pasado, que ha hecho posible el presente, y mirando hacia el futuro, Mauricio dijo: “Cincuenta años. Esa es la inspiración que recibimos, y ahora miramos hacia cincuenta años más.”
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