
A una semana de subir al ring en Stockton, el sábado 13 de diciembre, California, Skye Nicolson y Yulihan Luna Ávila superaron sin contratiempos el pre pesaje de siete días exigido por el Consejo Mundial de Boxeo, confirmando que ambas se encaminan en plena forma física hacia la disputa del campeonato mundial interino supergallo.
Nicolson, conocida por su disciplina casi quirúrgica en el corte de peso, presentó 56.7 kilos y mantiene la tendencia que la ha distinguido en sus últimas preparaciones: orden, estabilidad y un desgaste mínimo en la etapa crítica.
Luna, por su parte, llega con 55 kilos. La mexicana, más acostumbrada al choque y al combate físico, se encuentra en un punto que le permitirá encarar la última semana sin sacrificar energía ni ritmo de trabajo.
El duelo, ya atractivo por el contraste de estilos, suma ahora un factor adicional: ninguna de las dos enfrentará la típica guerra con la báscula. Todo apunta a que el próximo sábado veremos una pelea en la que la técnica, la velocidad y la toma de decisiones serán determinantes.

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