El corazón de una madre no conoce de imposibles
Ella es Antonina Vakulenko, originaria de Velyka Dymerka, Ucrania, lugar que vio nacer al ex campeón mundial WBC, Viktor Postol y hogar de esta guerra de la vida quien jamás ha bajado la guardia.
Antonia es una mujer que a pesar de las vicisitudes de la vida, jamás a dejado que su espíritu guerrero decaiga, pues sabe que ella es el pilar y motor de su hijo, quien ha adoptado la valentía de su madre y día a día lucha por salir adelante a pesar de su discapacidad.
Ambos, son el uno para el otro y juntos han sabido salir adelante a base de perseverancia, trabajo duro pero sobre todo, profesándose un amor incondicional, siempre buscando el lado más positivo; sin embargo, los horrores de la guerra llegaron hasta su hogar, pues este asentamiento de tipo urbano fundado en 1552 como un pueblo, recientemente fue ocupado por el ejército ruso lo que trajo desolación, momentos de muchísima angustia, caos, incertidumbre y por supuesto miedo.
Los bombardeos efectuados en Velyka Dumerka orillaron a Antonia a dejar su casa y correr en busca de un lugar seguro, así que con su hijo en brazos salió a esconderse, en ese momento lo material, no importaba, el único pensamiento de esta madre era salvar a su hijo y a ella misma pues sabe que su hijo depende completamente de ella.
Afortunadamente y gracias a la rápida reacción de Antonia ellos salieron ilesos; no obstante, al regresar a casa se dieron cuenta de que su hogar resultó severamente dañado, ventanas y puertas rotas, los ductos de agua y gas destrozados, el techo caído…su refugio había sido prácticamente destruido.
Hoy está pequeña gran familia busca regresar a su “normalidad” a ese espacio tan suyo donde hasta hace poco estaban felices a pesar de todas las dificultades.
La historia de Antonia y su hijo ha tocado muchos corazones entre ellos los de nuestra querida amiga Alina Shaternikova, Vicepresidenta de la Liga Nacional de Boxeo Profesional de Ucrania, quien luego de visitarlos y ver los terribles daños que sufrió su hogar, no dudó en ofrecerles ayuda, por lo que ella misma ayudó a quitar algunos escombros y trató de despejar las áreas más importantes de la casa; sin embargo, y pese a sus buenas y desinteresadas intenciones la ayuda no fue suficiente, por lo que el WBC también se puso en la esquina de Antonia para ayudarla con una donación con la que pueda iniciar las reparaciones; sin embargo, aún queda mucho por hacer pero estamos convencidos que juntos podemos ayudarlos y demostrarles que la familia del boxeo está con ellos, que no permitiremos que caigan a la lona, por
lo que te invitamos a hacer una donación en
¡Hoy por ellos, mañana por nosotros!